En la antigüedad clásica llegó a ser un producto muy elaborado y de gran lujo con la cultura helenística, en que se empezaron a realizar obras más complicadas con temas complejos y episodios de la vida cotidiana y de la mitología. Los materiales empleados también fueron más ricos (mármol, vidrio, ónice). El arte del mosaico adquiere su difusión en época del Imperio romano.
El mosaico veneciano, más conocido como venecitas, es un revestimiento de material vítreo fabricado con materias primas de origen natural, que se caracteriza por tener una gran resistencia. Es utilizado tanto en interiores como en exteriores. Desde la decoración, resulta elemento únicos y diferenciadores que permiten hacer guardas y dibujos que personalizan el diseño. De esta forma, se trabaja con mosaicos venecianos casi con la misma libertad que con la pintura. La versatilidad estética del mosaico veneciano permite utilizarlo en aplicaciones como piscinas, fuentes, terrazas, murales.
El mosaico hidráulico es una baldosa decorativa de cemento pigmentado, de uso interior y exterior. Inventado en el sur de Francia a mediados del siglo XIX. A partir del 2010 se ha ido convirtiendo en una fuerte tendencia ya que combina a la perfección en decoraciones vintage, rústicas, en reformas de edificios históricos, pero también en ambientes modernos, y contemporáneos, pues existen múltiples decorados, colores y variables. Los motivos o diseños se pueden agrupar en colecciones Natural o Floral, Art-Deco, Vintage, Geométricos, y Clásicos o Tradicionales.